La co-creación de la realidad del planeta está bajo la responsabilidad de cada una de las mentes de los seres humanos en la tierra, este hecho ya era conocido por los antiguos, los druidas por ejemplo, explicaban cómo la falta de creencia en la magia y los seres de la naturaleza (elementales, hadas, duendes) fue separando esta realidad de la del humano a tal punto que si alguien cruzase el umbral aún si pudiera volver habría pasado mucho tiempo y sus seres queridos estarían muertos, pues las líneas espacio temporales se distanciaron quedando en diferentes planos.
Luego los mismos Druidas, la magia y su Diosa creadora fueron desapareciendo a otro plano con la invasión cristiana que obligó a todas las personas a convertirse en su fe machista y llena de miedo. El cristianismo (que en sus principios bajo los romanos estuvo aún más lejos de la fe que profesaba Jesús) al construir sus iglesias por doquier se apoderó del subconsciente creador colectivo, miles de personas alrededor del globo orando y pensando en las mismas cosas (culpa, miedo, pecado, el supuesto derecho del hombre sobre la mujer, la obligación de la castidad, y la condena de la sexualidad entre otras ideas limitantes), haciendo que entráramos en una era de ignorancia donde los conocimientos antiguos sobre la importancia de la energía femenina en la armonía de los pueblos, los elementales, la sabiduría ancestral, la magia de la naturaleza, el poder sanador de las plantas y piedras, la bondad innata del hombre fue remplazado por la condena, el miedo y la ambición romana.
El concepto de co-creación no es nuevo, los druidas entre otras culturas lo dejaron escrito, pero no hemos querido hacernos cargo y preferimos que unos pocos nos hagan pensar, así seguimos religiones separadoras que condenan a seres humanos igual a nosotros, nos permitimos ser mentes huecas que se llenan con lo que los medios de comunicación deciden, o por partidos políticos dando como resultado división y caos.
¿Qué realidad buscamos en esta nueva etapa?
¿Qué estamos frente a que Queremos realmente co-crear?
Hasta donde yo sé por mi experiencia cómo terapeuta, el patrón de búsqueda en todas las personas es la felicidad, estabilidad y armonía. Por lo tanto esas deberían ser las bases mentales que den partida a nuestro pensamiento.
¿Y cómo hacerlo cuando el mundo muestra una realidad difícil y caótica?
La fé es la respuesta, y no un Dios que tendrá piedad, (Dios es la existencia misma de todo, lo compone todo y nosotros al ser parte de él creamos nuestra realidad gracias al libre albedrío que yo prefiero llamar libre responsabilidad) sino en nuestra propia grandiosidad interior, CREE para CREAR ya los mayas lo decían.
Es un momento clave del planeta, 2017 trae un montón de potencial energético para esta creación en masa de realidad por eso debemos enfocarnos en lo que queremos únicamente. Dejar de vernos como enemigos y buscar siempre la integración. Apoyémonos en amor por más diferentes que seamos, la colaboración es la única manera de evolucionar como raza y crear una realidad más amigable.
Volver a la raíz de todo como cuando nuestras culturas antiguas muy sabios y sabias vivían en conexión espiritual sin necesidad de instituciones y templos solo desde el corazón y la bondad, en respeto absoluto por la naturaleza y toda vida.
Venimos creando realidad desordenada y sin balance por la separación y el miedo, todos buscan estar bien de manera individual pero así nunca se logrará porque todo está conectado, si tú quieres armonía, bienestar, abundancia es preciso que te alegres cuando otros lo logran o que apoyes para que otros accedan a esos beneficios porque ellos son tú.
Los medios siempre intentarán separar a las personas clasificándolas por banalidades como moda, dinero, posición, partido político, bueno, malo, gremio etc. No caigas en la trama, es tiempo de que retomes tu poder creador y decidas que realidad quieres para el planeta, ¿más materialismo y frialdad efímera? o más felicidad para todos.
Yo estoy segura que en el fondo todos deseamos un mundo mejor y la única forma de hacerlo es pensando de forma responsable y consciente propendiendo por el bienestar colectivo.
Bendiciones en Luz!
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